Cliente
polémico:
Características:
Le gusta buscar discusión, pero no
llega a ser grosero.
Discute por el precio, la competencia, la
entrega, el servicio.
Desconfía de las soluciones que se le ofrece.
Cuando nos encontramos con este tipo de clientes
tenemos en cuenta:
Tratamientos:
Debemos proveerle la mejor solución
disponible.
Ser cortés y amable en todo momento.
Saber escuchar sus quejas con atención y sin
interrupciones.
No discutir con ellos, adoptando una actitud amable,
serena tratando de tranquilizarlos.
Tratar de aclarar sus dudas.
Brindarles la atención necesaria logrando que
ellos la perciban desde el primer instante.
Cliente
sabelotodo:
Características.
Se
presenta en cualquier negociación que implique conocimiento o
tecnología.
Cree saberlo todo.
Mantiene
una actitud de superioridad
Es
muy exigente y retado.
En
ocasionas suele mostrarse agresivo.
Tratamientos:
Mostramos
una solución de manera que no se ofenda.
Mostrarnos interesados en su Conocimiento.
Hágale ver que sus aportes fueron valiosos
para la solución.
Se toma una actitud serena y atenta pero no
dejarse dominar.
Cliente minucioso:
Características:
Sabe muy bien lo que quiere.
Utiliza pocas palabras.
Exige respuestas concretas.
Va directo al grano, utiliza pocas palabras.
Tratamientos:
Se debe brindar una atención rápida.
Las respuestas deben ser precisas.
Demostrar seguridad y seriedad.
La cortesía y amabilidad son vitales.
Demostrar interés en sus necesidades.
Cliente hablador:
Características:
Amistoso, sonriente, conversador.
Necesita que estén pendientes de él.
Puede llegar a quitar mucho tiempo y hacernos
desatender a otros clientes.
Puede llegar a ser pesado.
Tratamientos:
Amabilidad y cortesía
Amplia sonrisa.
Demostrar interés en sus necesidades.
Debemos mantener el liderazgo en la conversación.
Hacer preguntas directas.
Evitar ser cortante.
Cliente indeciso:
Características:
Es tímido e inseguro.
Le cuesta decidirse.
Teme plantear claramente que cosa es lo que quiere.
Necesita reflexionar antes de hacer la compra, a
veces reflexiona demasiado.
Generalmente no compra de inmediato.
Es el típico “Regreso después”.
Tratamientos:
Debes animarle a que exprese sus necesidades
Sonrisa amplia y demostrar seguridad en el producto.
Conocer la competencia y nuestros puntos fuertes
sobre ellos.
Aceptar sus puntos de vista.
Cliente grosero:
Características:
Llega de mal humor.
Es confrontativo, se mantiene en un estado de
tensión.
Discute con facilidad.
Muchas veces es ofensivo.
Generalmente tiene un temperamento dominante y
agresivo.
Tratamientos:
Eludir sus groserías. No debemos darnos por aludidos.
Mantener la cortesía en todo momento.
No sonreír, se debe tratar de mantener un rostro
neutro.
Se presenta más en la post-venta.
Cliente impulsivo:
Características:
Cambia
constantemente de opinión.
Es impaciente.
Carácter Impulsivo e inestable.
Puede comprar mucho o no comprar nada.
Tratamientos:
Se debe demostrar seguridad en el producto.
Sonreír abiertamente y demostrar que la atención al
cliente es un placer y no una obligación.
Ser firme.
Actuar con rapidez.
Al llegar el momento adecuado, cierre la venta.
Cliente desconfiado:
Características:
Es un cliente que rechaza hasta los argumentos más
lógicos.
Duda de todo y de todos.
Es bastante susceptible.
Por naturaleza es desconfiado.
Trata de dominar al interlocutor.
Tratamientos:
Conservar la calma.
Transmitir seguridad en todo momento.
Estar seguro de lo que estas vendiendo.
Hacerle preguntas, definir y entender claramente sus
necesidades.
Buscar puntos comunes que le den confianza en
nosotros.